Sigo pensando que la comunicación es una de las anclas más importantes en la relación de pareja. Cuando hay una buena y sana comunicación, las diferencias, los problemas o cualquier obstáculo, pueden ser superado exitosamente por medio de la comunicación sin barrera.
Debido a que esta juega un papel preponderante en el matrimonio, es necesario que busquemos mejorar y crecer en esta área, ya que la vida y el bienestar de la pareja depende de ello.
Les comparto algunos consejos que pueden ayudarle a ser más asertivos a la hora de Hablar y escuchar a su cónyuge.
- Tenga la disposición de no interrumpir mientras el otro habla. Es importante que deje que la otra persona se exprese con libertad y sin interrupciones. A medida que se expresa también se libera de tenciones. Déjele hablar y espere su oportunidad. Cuando quiera interrumpir, muérdase la lengua.
- Preocúpese más por escuchar que por hablar. Escuche mirando a los ojos. Tenga una postura que haga sentir al otro que usted está interesado en lo que dice. Mientras escucha, enfóquese en lo importante y en las emociones, eso le hará más sensible al escuchar.
- Dispóngase no dominar la conversación. Hay parejas en la que alguno siempre domina la conversación, dejando poca oportunidad al otro de hablar. Propóngase tener una comunicación balanceada, donde ambos hablen sin que ninguno de los dos domine la conversación. Para lograr esto tome más tiempo a escuchar; hable sin dar muchas vueltas alrededor del tema, sea específico, y vaya al grano a la hora de dar su opinión.
- Por favor, demuestre interés por el tema expuesto. Es posible que lo que su pareja le dice no es relevante para usted, pero si para él o ella. Si no conoce del tema, busque información. Sino, pregúntele amablemente de qué se trata. Pero demuéstrele que usted está interesado en el tópico.
- Aprenda a hablar de aquello de lo cual no le gusta hablar. No sea selectivo, sea amplio con los temas difíciles y enfréntelos positivamente, con el deseo de solucionar o aclarar el punto. Mientras más evite tratarlos, más difícil será abordarlos la próxima vez.
- No deje que nada ni nadie lo desenfoque de su conversación. Apague el celular, no atienda llamadas, evite la computadora, deje de mirar al techo, apague el televisor, no juegue con lo que tiene en su mano. No le permita a los niños interrumpir, y concéntrese en ese tiempo especial de compartir con su pareja.
- Deje los sermones y consejos para sus amigos. La tendencia natural que algunos tienen, es dar su opinión, consejo o sermón a la pareja. Le animo a que busque primero la empatía. Esta hace que la persona se sienta comprendida, aceptada y no juzgada. Luego de llegar al corazón y a las emociones, entonces el camino estará listo para llegar a la razón.
Espero que estos consejos sean útiles para usted y su pareja. Compártanlos y discútanlo y decidan adoptar aquellos que reconocen son los débiles en su comunicación. Dios los bendiga.
Pastor, Eliezer J. Pérez
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