Hoy es muy común hablar de las metas o los sueños que se tienen en la vida. Algunas personas o empresas se establecen metas u objetivos que alcanzar, de esa manera le dan sentido o propósito a lo que hacen día a día, con la esperanza de ver en el corto, mediano y largo plazo su meta realizada.
Igual que las empresas o personas, la familia debe tener también metas y sueños que lograr. Cuando la familia establece metas claras, el día a día cobra sentido y todo lo que hacen sus miembros tiene una razón, un propósito.
Es hora que te detengas y pienses: ¿Cuál es tu sueño a lograr con tu familia? ¿Qué quieres que sean tus hijos en el futuro? ¿Cómo te ves con tu esposa, luego que los hijos salgan de la casa? ¿Tienes la meta de ser feliz y disfrutar de tu pareja por toda la vida? O te harás un matrimonio aburrido, igual que muchos. Te emplazo a que dediques tiempo a meditar, orar y buscar orientación al respecto, para que salgas de la monotonía y de una relación sin sentido ni propósito.
Lo primero que debes hacer es mirar en donde te encuentras ahora con tu familia. Medita en lo que no te gusta de tu familia y reflexiona en lo que desearías que fueran tus hijos, tu cónyuge, tus nietos. Cuáles son los puntos fuertes y débiles de la misma. Piensa en lo que más deseas en tu corazón y lo que quieres lograr de ellos. Algo que te puede ayudar es cómo te gustaría que recordarán a tu familia en el tiempo.
Deseo hacerte una pregunta que te ayudará en la tarea de establecer una visión clara. ¿Estás contento con la familia que son? ¿van tus hijos por el camino que les lleva al éxito en la vida? ¿Tu pareja se siente realizada y amada por ver que hay un propósito por el cual vivir en familia? O todo se ha convertido en ir al trabajo, lavar platos y cuidar niños, mirar la televisión y ver pasar la vida. Una familia así es una es una tristeza y lo más aburrido que pueda existir.
John Maxwell, en su libro, “El mapa para alcanzar el éxito”, dice: “El descontento es la fuerza que impulsa a la gente a buscar sus sueños … la complacencia nunca trae el éxito. Debe desear un cambio positivo. Solo el descontento constructivo lo motivará a encontrar su propósito y a alcanzar su potencial” Tu tienes que decidir no ser una familia más del montón, y para ello hay que establecer una visión clara de lo que quieres lograr con ella.
Cuando una familia tiene un sueño, una visión clara, esto le ayuda a mantenerse en el camino al éxito. Los obstáculos se convierten en oportunidades para crecer y cambiar. Las diferencias entre la pareja dejan de ser una amenaza, ya que ellos saben a donde van y lo que quieren lograr, por lo tanto, se animan y buscan ser mejores el uno para con el otro.
Una visión clara le ayuda a establecer las prioridades en la familia. Deja de hacer las cosas que no le agregan valor y se enfoca en aquellas que sí son importantes. Las tareas más insignificantes del día a día, cobran valor y propósito, porque está consciente que contribuyen al logro de su sueño.
Mi apreciado amigo(a), ¿puedes escribir el sueño, la visión que tienes para tu familia? Si no lo puedes hacer, ha llegado el momento de comenzar a trabajar en ello. Decide hacer de tu familia algo desafiante, motivador y con propósito. Recuerda, Lo que no crece y avanza se queda estancado, envejece y muere. ¿deseas eso para ti y tu familia? Entonces comienza a trabajar en la razón de existir de la misma. ¡No te rindas!
Pastor, Eliezer Pérez.