Como se habló en el articulo anterior, muchas veces el duelo toca a las puertas de nuestras vidas de manera inesperada y sumamente dolorosa. En medio de este proceso, nos hacemos preguntas de tipo espiritual, existencial y otras de índole personal. ¿Cómo podré superar y enfrentar esta perdida? ¿Cómo podré superar este dolor tan profundo que siento? Hoy, quiero darte algunas pautas que te ayudarán a sobrellevar tu perdida.
Primero que nada, es importante que tomemos en cuenta tres cosas:
1) El proceso de duelo varía de acuerdo a la edad, género (femenino, masculino), y personalidad del individuo. Hay investigadores que consideran que las diferencias en cuanto a como enfrentamos la perdida no depende del género sino del estilo particular en que cada individuo enfrenta dicha circunstancia. No obstante, el trasfondo cultural de cada persona afectará la manera en como este percibe que es socialmente aceptable que un hombre o que una mujer enfrente el duelo.
2) El tipo de muerte o condiciones bajo las cuales se dio la pérdida, pueden afectar la duración y gravedad del proceso de duelo. Las pérdidas que se han dado de manera traumática (homicidio, suicidio, accidente, temprana edad, etc.), inesperada o después de una larga enfermedad, suelen generar un duelo mas intenso y confuso para el individuo.
3) A veces el duelo parece ser superado, pero tiempo después volvemos a sentir fuertemente la perdida de ese ser querido. Este proceso es normal y puede darse aun décadas después de la pérdida. No, obstante este proceso irá disminuyendo su intensidad y duración poco a poco.
Tomando en cuenta los factores anteriores, podemos considerar algunas acciones a tomar en nuestro proceso de duelo:
- Haga un Memorial: en ocasiones hay familiares que sienten que no pudieron llegar a despedirse de ese ser querido. Planifique un evento en donde se reúnan las amistades del ser amado y juntos compartan las experiencias que tuvieron la oportunidad de vivir al lado de esa persona. Pueden colocar fotos de la persona, y colocar un cuaderno especial, en donde cada uno le escriba algo al ser que ha partido. Otras maneras de hacer un memorial son: plantar un jardín en recuerdo a esa persona, sembrar un árbol, hacer una pintura en recuerdo a ese alguien especial, etc.
- Busque un grupo de apoyo: la comunidad, las Iglesias y organizaciones sociales pueden ofrecer espacios para apoyar y ayudar a aquellos que están pasando por un proceso de duelo. Infórmese si en su comunidad o país existen grupos de apoyo de duelo. Internet es un buen medio para conocer de estos grupos en su zona.
- Permítase llorar y recordar: permítase sentir su dolor, llorar en privado y en ocasiones en público. No reprima sus sentimientos por el que dirán, no se avergüence de vivir su proceso. Recuerde los momentos especiales junto a esa persona, así como los aprendizajes obtenidos de dicha relación.
- Escriba una carta: El escribir es un medio a través del cual pueden desahogar sus sentimientos. Tome papel y lápiz, y si así lo siente, escríbale a ese ser amado una carta en donde exprese su tristeza. Cuando se esta viviendo la fase de la aceptación, leea articulo anterior dándole click aquí dicha carta puede servir como un medio para finalmente cerrar en parte ese ciclo en su vida. Escribir poemas dedicados a esa persona, o simplemente reflexiones acerca del duelo, pueden también ayudarle a lidiar con su dolor.
- Busque al menos 3 amigos que le apoyen: busque tres personas de confianza con quienes pueda reunirse al menos una vez a la semana y a los que pueda llamar o con quienes sentarse a conversar. Durante el duelo, es importante desahogar nuestros sentimientos, o simplemente compartir eventualmente con alguien.
- Oblíguese a salir y a reanudar poco a poco sus actividades: durante el proceso de duelo es muy difícil volver a retomar nuestra vida, es por ello que resulta necesario obligarnos a salir e irnos incorporando paulatinamente a nuestra rutina. Salga, camine por el parque solo (Y si quiere compañía pídale a alguien que vaya con usted), etc.
- Busque hacer una actividad física: la actividad física nos ayuda a lidiar con el dolor, pues hormonalmente nos estimula, y nos proporciona un sentido de bienestar y nos calma. Al mismo tiempo, nos ayuda a relajarnos y a regular nuestro sueño (que se ve muchas veces alterado durante el duelo).
- Recuerde las cosas buenas pero también las malas de ese ser amado: es normal que en cierto punto tengamos la tendencia a idealizar a la persona que ha partido. No obstante, también es sano recordarle como un ser humano con fallas y errores. Al hacer esto, no deshonramos su memoria, ni mostramos menos amor, sino le recordamos tal cual era. Una sobre idealización prolongada del ser amado que ha partido, puede llevarnos a un mayor desbalance emocional.
Siempre recordemos que el duelo es un proceso individual y particular. Superar el duelo no implica olvidar al ser amado, es simplemente aceptar que este ha partido.
Psicóloga Anaely Pérez.
Artículos Relacionados:
Escuchar parece una tarea sencilla, pero no lo es. El acto de escuchar no es solamente detenernos a ...
No nos engañemos, en algún momento hemos presentado conductas egoístas que no favorecen las relacion...
No cabe duda que todos en algún momento hemos perdido a alguien o algo muy amado. El dolor es intens...